En esta oportunidad quiero enfatizar sobre algunos errores que debemos evitar para estar siempre “a la altura”.
- Para sentarnos debemos mover la silla sin arrastrarla.
- Tan pronto nos sentamos a la mesa, desdoblamos la servilleta que estará a la izquierda, sin aspavientos y la pondremos en el regazo para limpiarnos las comisuras de los labios. Al finalizar dejaremos la servilleta a la derecha de manera casual sin doblarla.
- Nunca se limpian los cubiertos con la servilleta. Si están sucios pediremos amablemente su cambio.
- Solamente empezamos a comer cuando todos los platos estén servidos, cuando el anfitrión de la mesa lo haga o cuando éste nos lo indique.
- Evitemos todo tipo de ruido innecesario al comer o manipular los cubiertos.
- Sirvámonos con moderación. Si nos gusta mucho la comida, podemos dejar el plato vacío sin que esto se vea mal.
- Cerremos la boca al masticar. No hablemos con la boca llena, ni la tapemos para hablar mientras comemos, “una cosa a la vez”.
- Antes de introducir otro bocado nos aseguramos de haber pasado el anterior. Nunca bebamos mientras tengamos comida en la boca, es de muy mal gusto.
- La limpieza de los dientes es algo muy personal, por lo tanto el uso de la seda dental o los palillos, dejémoslo para el baño y mejor, lejos de la vista de otros.
- El plato de pan estará a la izquierda. El pan se come por trozos, inclusive si queremos poner un poco de mantequilla se pondrá solo al bocado que introduciremos a la boca.
- Los codos van por fuera de la mesa y los antebrazos arriba de ella.
- Si estamos en una fiesta donde se sirve cena, evitemos pedir que no nos sirvan, ya que será descortés. Trataremos de comer, así sea un
- Si llamamos al mesero evitemos las palmadas o los gritos.
Por: Adriana Uribe